Génesis de la Muerte.
Por: Cristóbal Rodríguez Hernández.
En un principio, la hija de las tres primigenias, conocidas como Nacimiento, Crecimiento y Muerte; tenía a sus dos hijas viviendo con ella y se les conoce como Viento y Agua.
Viento junto con Éter padre de todos menos de la Triada Universal, padre y hermano de Tierra, crearon al inquieto y rebelde fuego.
De Fuego y Agua se creo, con la gracia de Madre Tierra a Magma. Posteriormente Agua y Aire crearon a Hielo. Muchos son los hijos de Aire y Agua; podemos citar a Rayo y Huracán, incluso fuego tiene una vasta descendencia, Todos unidos en Éter, el oxigeno de todos menos de la Triada Universal.
Los elementos convivieron así en armonía, por mucho tiempo.
Madre Tierra gobernaba a todos, más no se debe uno de confundir con el hecho de que Tierra creó todo cuanto hay en ella o incluso a sus hijas, todos parten de la Triada, viven en ella y mueren en ella.
Pero un día sucedió que Nacimiento cometió un error y produjo de más. No se sabe como pero sin quererlo o talvez con toda la intención, Nacimiento creo a Antimateria. Que era oscuridad y ausencia de todo, mejor conocido como la Nada.
Con esto, Muerte tuvo un desvalánce a su favor y de cierta forma menguó el poder de las otras dos.
Al pasar Antimateria por Crecimiento, provocó más errores, pues todo lo que entraba en contacto con la Nada, desaparecía. Nacimiento se vio forzado a crear más y más rápido para compensar la destrucción ocasionada por Antimateria. Por su parte Crecimiento no se daba abasto para producir y madurar todo lo que le pasaba Nacimiento, viéndose obligado a pasar por desarrollado lo que todavía no lo estaba, dándole mucho trabajo a Muerte, quien gracias a Antimateria gozaba de una esplendida capacidad para hacer su trabajo: Destruir.
Todo es un círculo, una serpiente que se muerde la cola, o una cola dentro del hocico de su dueña viperina. Y Nacimiento tenía mucho que reciclar, mucho que dar a Crecimiento. Así empezó el Caos.
En la Tierra, todo esto se resintió de forma tormentosa, pues al entrar en desacuerdo con su Hermano Aire, se enemistó con su nieto fuego y su bisnieto Magma. Por lo mismo, Agua también odió a su madre e intentó cubrir en vano a su progenitora. Éter no podía intervenir, después de todo Él solo es un medio. Las rebeliones y las disputas dieron lugar a nuevas especies, especies de cuatro patas y multicelulares, primero tenían escamas, luego se vio también a criaturas emplumadas, todas empezaron a destruir poco a poco a Madre Tierra, devorando a sus sueños conocidos como Plantas. Era evidente que algo sucedía con la rebelión, de cierta forma la utilizaban (a Madre Tierra) para crear abominaciones que seguían alimentando al desequilibrio.
Agua y Fuego, junto con Aire y sus demás aliados decidieron dar fin a quien les daba sustento, decidieron terminar con las diferencias exterminando a la orgullosa Tierra; planeando así la manifestación viva de la fragmentada Triada Universal, planeando la llegada a la Tierra del peor de todos los frutos.
Por su parte Antimateria anidó en el corazón del nuevo engendro.
Magma era suspendida abruptamente del centro de Tierra. Agua lanzaba con toda su furia a Mar sobre Tierra, Gaia le decían, la despreciable; La madre traidora.
Viento azotó con furia a los sueños de Gaia, Tornado y Huracán burlaban fácilmente a los montes y las cordilleras, escudos naturales de protegían lo que Madre Tierra más amaba.
Lago y Manantial; así como otros de sus hermanos, no servían a ningún bando. Por el contrario ayudaban o eran victimas de lo que sucediera con los mayores.
Madre, tan violenta y poderosa, exterminaba fácilmente a sus atacantes, los devoraba con sus gritos conocidos como Terremotos y nadie, ni Agua ni Viento, podían contra Ella.
La Triada Universal comenzó a perder forma y Antimateria se convirtió en una esfera aparte, regida por Muerte, quien no conforme con lo que le daban para destruir, quería y exigía más, incluso tomaba por el simple hecho de tomar. Por el simple hecho de poder.
Así, después de siglos de guerra eterna, llego lo que terminaría de una vez por todas con la gran madre. Esa fue una abominación terrible, que marcó el antes y el después de la gran guerra.
A la Madre Tierra le llegó su fin, pues de sus atacantes recibió al peor de los enemigos.
Este enemigo, no era igual a los seres de cuatro, dos y hasta nueve extremidades que ya atormentaban a Madre, ni siquiera se asemejaba un poco a los moradores del Viento.
Fue diseñado para que todas y cada una de sus funciones fueran en contra de Gaia, hijos de Antimateria y Muerte, duales de Aire, Agua y los demás elementos; creados fuera del Éter.
Los conocieron como hijos de la Muerte.
Los primeros creados fuera de la Triada.
Los primeros y los que serían los destructores de Madre.
LA RAZA HUMANA.
Concebida en el Mar, puso sus pies sobre su victima. Tan crueles y despiadados como Muerte misma.
Al ver a su corazón en el cielo, el cual es Antimateria lo llamaron espacio, al huevo de donde emergieron le llamaron luna, el cual fue puesto sobre la Tierra, para que esta recordara por siempre el momento en que conoció a sus destructores.
Por ultimo, al ver al gran ente que les dio la conciencia que todo lo destruye, a la grande y poderosa Muerte, le llamaron Sol.
A partir de aquí todo es historia, Madre ha intentado aplastar con Terremotos y Tormentas; Maremotos y Ciclones a los engendros destructores, usó todo cuanto tubo a su disposición.
Todo será en vano, pues Tierra, Tiene contados sus días.
Los tuvo Marte, los tuvo Júpiter, y todos los predecesores de Tierra sufrirán el mismo destino.
De Creación ya no nace nada y Crecimiento esta casi destruido, agotado.
Muerte domina a todo y su hijo favorito Antimateria se esta devorando todo cuanto ve.
Por su parte Tierra es victima de una venganza atroz al ser devorada por sus habitantes, los cuales no respetan la alianza, destruyendo incluso a Aire y a Agua; usando a fuego e incluso a Éter, con el que crearon utensilios capaces de destruir en una reacción atómica, por lo menos diez veces a la Tierra.
Ninguna plaga podrá con ellos, ni glaciaciones ni terremotos, todo se ira al Abismo.
